¿Por qué se ponen amarillas las hojas de las plantas?

Antes de que pienses que tu planta ha muerto u no tiene solución, debes saber lo siguiente:
El color amarillo en las plantas se llama clorosis y es una deficiencia de clorofila, esta es la responsable de darle el color verde brillante a las plantas. Al no haber suficiente clorofila, la fotosíntesis no ocurrirá de forma correcta, la hoja se secará y se caerá.
La clorosis puede ocurrir por diversos factores:
Riego inadecuado:
Si todas las hojas están amarillas lo más probable es que te estes pasando de agua, si el color amarillo es disparejo, puede ser que no esté recibiendo suficiente agua
Problemas de iluminación:
Para realizar la fotosíntesis se requiere de luz solar, pero es importante tomar en cuenta la especie de la planta, pues algunas no requieren tanta luz
Falta de hierro:
Si el sustrato donde está sembrada la planta tiene un PH incompatible con las necesidades de la planta, puede ser que la absorción del hierro se vea afectada y se produce la clorosis.
Si la hoja se pone amarilla, pero la nervadura permanece verde, entonces le falta hierro.
Falta de nitrógeno:
Esto puede observarse cuando las plantas han pasado demasiado tiempo en la misma maceta, que comienza a quedar pequeña y el sustrato ha agotado todos los nutrientes.
Plagas de nematodos y otros:
Los nematodos son unos gusanos microscópicos (unos 0,2 mm) que se adhieren a las raíces, interrumpiendo el transporte de nutrientes.
Verifica las veces que riegas tu planta, también hay que revisar el sustrato.
Para plantas pequeñas o en macetas, revisa que estés utilizando el tipo de sustrato adecuado y añade gravilla en el fondo, para facilitar el drenado. Verifica que los agujeros de drenaje no estén obstruidos. Te recomendamos mezclar la tierra con un poco de arena de río para mejorar la permeabilidad.